"Iba a menudo a mirar la colección de curiosidades en el Castillo de Heidelberg y un día sorprendí al encargado del lugar con mi alemán. Hablé completamente en esa lengua. Él estaba muy interesado y después de haber conversado dijo que mi alemán era muy raro, posiblemente un “ejemplar único”, y quería agregarlo a su museo."
Así comienza La horrible lengua alemana de Mark Twain, texto que ha sido traducido por nuestro editor René Olivares Jara y que recientemente ha sido publicado por Editorial La Pollera. En este él, el autor norteamericano expone con su genial humor su
frustración por no poder aprender bien este idioma y propone, muy en su estilo, ciertas reformas que necesita el alemán para que no termine siendo una "lengua muerta". Pues como experto en materias lingüísticas Twain afirma:
Para los interesados en adquirir un ejemplar, pueden pedirlo por el siguiente enlace de la
Editorial La Pollera: https://lapollera.cl/libros/